Hoy 25 de setiembre de 2009, concluye mi mandato como Secretario General de la Federación Judicial Argentina iniciado en el mes de setiembre del año 2000. Han pasado nueve años muy importantes de la vida de nuestra querida Federación Judicial Argentina y en ese periodo se produjo un crecimiento notable de filiales y reingreso de otras.

Hoy Tierra del Fuego y La Pampa , las de reciente creación, están funcionando con una dinámica enorme a pesar de haberse constituido el año anterior.

Ciudad Autónoma de Buenos Aires se integró ya hace un tiempo importante sumándose decididamente al movimiento de trabajadores judiciales nucleados en nuestra federación, cuya bandera más alta es la del pleno respeto a la pluralidad ideológica, la restitución del régimen porcentual en el marco de las convenciones colectivas de trabajo -que se obtuvieron en MENDOZA y SANTA CRUZ, siendo inminente la sanción de un plexo normativo en NEUQUEN antes de la finalización del mes de octubre- y una frontal política destinada a lograr realmente una justicia democrática e independiente que posibilite hacer realidad nuestra máxima bandera que es JUSTICIA PARA TODOS.

En mis periodos como secretario general tuve el orgullo de ser acompañado por compañeros y compañeras que merecen mi más calido agradecimiento. Mientras transcurría el tiempo, se sumaban a la entidad SALTA, MENDOZA, FORMOSA y recientemente CORDOBA con todo su bagaje de historia y compromiso con los judiciales del país.

En definitiva, esto es un saldo favorable y más que positivo para una federación que apostó al compromiso de lucha y a consolidar un método de trabajo democrático, participativo y que en cada día de los transcurridos dio muestras concretas de integrarse al movimiento obrero en el país y continuó con la política iniciada en 1992 con la fundación de la Coordinadora de Gremios Estatales del Cono Sur, una realización que debemos concluir pero que es mérito casi exclusivo de un gran compañero que deja la conducción hoy de la Federación Judicial Argentina tras más de cuarenta años de militancia gremial, de desplegar solidaridad a raudales, de construir organización y de impulsar la capacitación de los compañeros. Me refiero a mi amigo JULIO BERTOMEU. Sus convicciones integracionistas lo llevaron visionariamente a apostar a la constitución de este instrumento de unidad de trabajadores del Cono Sur de América Latina para dar una lucha frontal contra la falta de justicia paradójicamente en los poderes judiciales de todo el continente.

Nuestras convicciones nos llevaron también a ser fundadores del ENCUENTRO SINDICAL NUESTRA AMERICA que nuclea a miles de trabajadores del continente que están dispuestos a integrarse y luchar frontalmente contra la injusticia social que impera en el continente con más riquezas naturales, pero que es el más desigual que se conozca. Hoy participamos precisamente en San Pablo, Brasil, del Segundo Encuentro de este grupo de opinión que no apuesta a instrumentar un organismo burocrático, sino que su intención decidida es asumir la lucha de clases para reivindicar la participación de nuestro sector en la decisión de los grandes temas nacionales y latinoamericana.

Tenemos participación decidida en la CENTRAL DE TRABAJADORES ARGENTINOS (CTA) donde Victor MENDIBIL cumple también una decidida gestión integracionista de la clase trabajadora argentina. A su vez, estuvimos y estamos en ese proyecto utópico que va haciéndose realidad y que es la Constituyente Social.

También desplegamos nuestra solidaridad fraterna hacia todos los trabajadores que tienen el enorme desafío de llevar adelante este proyecto liberador que ya los pueblos de América latina como VENEZUELA, ECUADOR y BOLIVIA impusieron luego de largas luchas sociales y que costo sangre de trabajadores peleando por modificar la postergación inaceptable que viven amplios sectores de nuestra geografía.

Visité todas las filiales de la Federación Judicial Argentina, donde llevamos nuestro mensaje de unidad y lucha como así también la necesidad de integrarse decididamente al movimiento de trabajadores abandonando viejos preconceptos que nada aportan a solucionar los múltiples problemas que nos aquejan.

Así pude compartir largos momentos más que gratos con trabajadores judiciales de todo el país que comprendieron y hoy acompañan decididamente la política que hemos llevado adelante con decisión y con el apoyo de la gran mayoría de los judiciales de todas las provincias.

Nos falta la organización de la filial Catamarca que ya obtuvo su inscripción gremial, pero este será un nuevo eslabón de la cadena de judiciales que se sumarán a la lucha por una justicia social que implique salud, viviendas, educación, no solo para nuestro sector, sino para todos los habitantes de nuestro querido país que no merece ser testigo de la hambruna de nuestros niños. EL HAMBRE ES UN CRIMEN es una definición que compartimos y que nos produce una tristeza infinita cuando vemos que se nos mueren de hambre nuestros niños mientras aportamos comida para cuatrocientos millones de seres humanos en el mundo.-

Esta realidad inexplicable para quienes nos visitan y conocen de nuestra realidad, nos abruma, nos hace juntar bronca y nos produce rebeldía, porque todos los partidos políticos que han estado en el gobierno desde que logramos desplazar a los genocidas que asolaron nuestra tierra de 1976 a 1983, no han hecho absolutamente nada y se han convertido en cómplices de los grandes especuladores internacionales que a través de profundizar las diferencias sociales, logran pingües ganancias en un país administrado por una clase política corrupta que es cuidadosamente protegida por un sistema judicial que en su estructura superior es también cómplice de las desgracias de nuestro pueblo. Con esta realidad, superamos varios desafíos y estamos frente a otros. El 2001 nos tuvo en la calle junto a otros sectores sociales reclamando por la justicia social que no llega y que motivó el desalojo de la Casa Rosada de cinco presidentes en una semana. Eso sí, el costo para el desalojo de FERNANDO DE LA RUA nos costó más de treinta vidas de queridos compañeros cuya memoria debemos honrar siguiendo en la lucha contra la dominación imperial.

Otra vez, como en la Patagonia Trágica y los Talleres Basenas o en el bombardeo a Plaza de Mayo, los trabajadores pagaron con su vida mientras los explotadores y los aprovechados hacian pingües negocios con la complicidad de la dirigencia política. Nuestro norte es el Sur dice el canal de televisión TeleSUR y esa enorme apuesta que cuenta con nuestra incondicional adhesión, porque en Venezuela se ha abierto un proceso democrático transformador al igual que en Ecuador y Bolivia, nos impone involucrarnos decididamente para lograr la verdadera liberación continental.

Es imposible que solos logremos sacudir de nuestra realidad la postergación social, el hambre, la desnutrición y la mortalidad infantil, la falta de infraestructura de una nación donde todo está por hacerse. En consecuencia, para concretar los cambios, tenemos la convicción de que el camino pasa por integrarnos con los demás pueblos de América latina, con la clase trabajadora de la cual formamos parte.

Luego de haber cumplido en el 2008 cincuenta años de vida, iniciamos hoy en la FJA una nueva gestión con un cuadro que es ejemplo para los judiciales: el compañero y amigo VICTOR MENDIBIL que en su mochila llevará a partir del día 26 la pesada carga de continuar con nuestra lucha, pero como conozco de sus convicciones y compromiso, seguramente la alegría y la sensación del deber cumplido, será el saldo que a la finalización de su mandato tendrá, al igual que me ocurre en este momento a mí.

Compañeras, Compañeros: mi enorme agradecimiento a todos sin excepción por el acompañamiento, el compromiso y la adhesión que la Federación Judicial Argentina les merece y el apoyo que a mi gestión tuvieron. Hemos cometido errores no queridos, pero la convicción es una sola: LOGRAR QUE LOS TRABAJADORES DE TODO EL PAIS, ENTRE LOS QUE SE INCLUYEN LOS JUDICIALES, OBTENGAN LA JUSTICIA SOCIAL QUE SE MERECEN Y A LA CUAL HAN APOSTADO LUCHANDO FRONTALMENTE EN TODOS LOS FRENTES.

UN GRAN ABRAZO Y MI COMPROMISO PARA SEGUIR EN LA LUCHA. Y PERMITASEME UN AGRADECIMIENTO ESPECIAL: ES PARA MIS COMPAÑEROS Y COMPAÑERAS JUDICIALES DE LA PROVINCIA DE NEUQUEN. SIN EL TESTIMONIO DE LUCHA Y COMPROMISO CON LA CLASE HUBIERA SIDO IMPOSIBLE ARRIBAR A LA MAXIMA CONDUCCION SINDICAL JUDICIAL. ENTONCES, EN ESTE ABRAZO PARA ELLOS Y PARA TODOS USTEDES, EL AGRADECIMIENTO DE UN COMPAÑERO Y AMIGO.

JORGE ALBERTO IZQUIERDO

Secretario General de la Federación Judicial Argentina.